sábado, 17 de octubre de 2015

Previo al prólogo ...

de La muerte es una vieja historia de Hernán Rivera Letelier

martes, 16 de septiembre de 2014

De "Usted se tendió a tu lado" de Julio Cortázar.

"Pero te volvió la espalda y se tapó la cara con el sombrero de paja. El íncubo, el
insomnio, la vieja Delcasse, era para reírse. El filo del límite, ¿qué filo, qué límite? Todavía
era posible que uno de esos días la puerta del baño no estuviera cerrada con llave y que
usted entrara y te sorprendiera desnudo y enjabonado y de golpe confuso. O al revés, que
vos te quedaras mirándola desde la puerta cuando usted saliera de la ducha, como tantos
años se habían mirado y jugado mientras se secaban y se vestían. ¿Cuál era el límite, cuál
era realmente el límite?
—Hola —dijo Lilian, sentándose entre los dos."
Fragmento de "Usted se tendió a tu lado" de Julio Cortázar.

jueves, 16 de febrero de 2012

Mujeres que corren con lobos. Clarissa Pinkola Estés.

"El cuerpo utiliza la piel, las fascias profundas y la carne para registrar todo lo que ocurre a su alrededor. Para quienes saben leerlo, el cuerpo es, como la piedra de Rosetta, un registro viviente de la vida entregada, la vida arrebatada, la vida esperada y la vida sanada. Se valora por su capacidad de reacción inmediata, su profunda sensibilidad y su previsión.
El cuerpo es un ser multilingüe. Habla a través de su color y su temperatura, el ardor del reconocimiento, el resplandor del amor, la ceniza del dolor, el calor de la excitación, la frialdad de la desconfianza. Habla a través de su diminuta y constante danza, a veces balanceándose, otras moviéndose con nerviosismo y otras con temblores. Habla a través de los vuelcos del corazón, el desánimo, el abismo central y el renacimiento de la esperanza.
El cuerpo recuerda, los huesos recuerdan, las articulaciones recuerdan y hasta el dedo meñique recuerda. El recuerdo se aloja en las imágenes y en las sensaciones de las células. Como ocurre con una esponja empapada en agua, dondequiera que la carne se comprima, se estruje e incluso se roce ligeramente, el recuerdo puede surgir como un manantial.
Reducir la belleza y el valor del cuerpo a cualquier cosa que sea inferior a esta magnificencia es obligar al cuerpo a vivir sin el espíritu, la forma y la exultación que le corresponden. Ser considerado feo o inaceptable por el hecho de que la propia belleza esté al margen de la moda actual hiere profundamente el júbilo natural que es propio de la naturaliza salvaje.
Las mujeres tienen buenos motivos para rechazar los modelos psicológicos y físicos que ofenden el espíritu y cortan la relación con el alma salvaje. Está claro que la naturaleza instintiva de las mujeres valora el cuerpo y el espíritu mucho más por su vitalidad, capacidad de reacción y resistencia que por cualquier detalle de su aspecto. Lo cual no significa rechazar a la persona o el objeto que es considerado bello por algún segmento de la cultura sino trazar un circulo más amplio que abarca todas las variedades de belleza, forma y función."

martes, 17 de mayo de 2011

2666 Roberto Bolaño

"Y Norton les dijo que sólo era una pregunta. Y Pelletier y Espinoza le dijeron que no estaban dispuestos a responder a una pregunta tan cáustica o capciosa o mal intencionada. Y luego se fueron a cenar y los tres bebieron más de la cuenta, felices como niños, hablando de los celos y de las funestas consecuencias de éstos. Y también hablando de la inevitabilidad de los celos. Y hablando de la necesidad de los celos, como si los celos fueran necesarios en medio de la noche. Para no mencionar la dulzura y las heridas abiertas que en ocasiones, y bajo ciertas miradas, son golosinas. Y a la salida tomaron un taxi y siguieron discurseando".

Pp. 101.

martes, 13 de mayo de 2008

Si tomas la influencia, por lo menos reconoce de dónde la estás tomando...

“No apacigüemos al día y salgamos a cara descubierta
cara a los países desconocidos que interrumpen el canto de los pájaros
la asechanza se instala a lo largo de un ruido de confines de planetas
no prestes atención a las orugas que tejen
una carne sutil con hombros y senos posibles
sino sólo a los milibares que se plantan en el ojo de una tormenta
para liberar el espacio donde se yerguen el corazón de las cosas y la llegada del hombre
Sueño no apacigüemos
entre los clavos enloquecidos
un rumor de lágrimas que se dirige a tientas hacia el ala inmensa de los párpados”.

“Milibares de la tormenta”, Aimé Césaire.

sábado, 26 de abril de 2008

Solo Literatura. Solo Ficción.


Yo, mientras tanto me distancio: leo el siguiente cuentito. En realidad, para secarme las lágrimas.

Opresión

El Maestro siempre permitía que cada cual creciera a su propio ritmo. Que se sepa, nunca pretendió "presionar" a nadie. Y él mismo lo explicaba con la siguiente parábola. "Una vez, al observar un hombre como una mariposa luchaba por salir de su capullo, con demasiada lentitud para su gusto, trató de ayudarla soplando delicadamente. Y en efecto, el calor de su aliento sirvió para acelerar el proceso. Pero lo que salió del capullo no fue una mariposa, sino una criatura con las alas destrozadas.Cuando se trata de crecer, concluyó el Maestro, no se puede acelerar el proceso, porque lo único que puede conseguirse es abortarlo."


Pero, qué quieres: me produces vergüenza ajena.

miércoles, 28 de noviembre de 2007

Conversación con...


"La referencia a Dios es un mecanismo que utilizamos -independientemente de su fundamento- para mirar el mundo con confianza; fe y confianza son a final de cuentas la misma cosa: la fe involucra una dimensión de la confianza mayor. El problema surge cuando nuestras diferencias en torno a la fe comienzan a separarnos y, en vez de generar una confianza mutua que se expanda y nos cubra a todos, creamos segmentos de confianza distintas donde comenzamos a antagonizanos. Si queremos avanzar hacia modalidades de convivencia distintas, el tema de la confianza es uno de los más importantes que tenemos que enfrentar."


En "Conversación con Rafael Echeverría", Rafael Echeverría & Cristian Warnken (2007); J.C. Sáez Editor, Santiago de Chile.